Se estima que se pueden prevenir del 30 al 50% de todos los cánceres siguiendo unos estilos de vida saludables, evitando la exposición a carcinógenos laborales, a la contaminación y a ciertas infecciones.
Esta es una de las principales conclusiones del tercer informe de expertos Diet, Nutrition, Physical Activity and Cancer: a Global Perspective (the Third Expert Report) (Alimentación, nutrición, actividad física y cáncer: una perspectiva global).
Seamos claros, en el desarrollo de un cáncer intervienen infinidad de factores, algunos no son modificables, como la edad, el sexo, la genética, pero otros sí, típicamente los estilos de vida y la exposición a ciertos elementos cancerígenos.
De todas formas, es necesario remarcar el mensaje con el que se abría este artículo, y es que seguir las recomendaciones del Código Europeo contra el Cáncer evitaría cerca del 50% de los casos diagnosticados.
No, no hay “secretos” ni alimentos milagrosos
De los 12 pasos para reducir el riesgo de cáncer propuestos por el mencionado código, 5 están estrechamente relacionados con los estilos de vida relativos a lo que se come y nos movemos. En concreto, recomiendan:
- Mantén un peso saludable.
- Haz ejercicio a diario. Limita el tiempo que pasa sentado.
- Come saludablemente
- Consume gran cantidad de cereales integrales, legumbres, frutas y verduras.
- Limita los alimentos hipercalóricos (ricos en azúcar o grasa) y evita las bebidas azucaradas.
- Evita la carne procesada; limita el consumo de carne roja y de alimentos con mucha sal.
- Limita el consumo de alcohol, aunque lo mejor para la prevención del cáncer es evitar las bebidas alcohólicas.
- Para las mujeres: la lactancia materna reduce el riesgo de cáncer de la madre. Si puedes, amamanta a tu bebé.
Por su parte, la Fundación Mundial para la Investigación del Cáncer en su extensísimo informe, concreta todas sus recomendaciones en los siguientes mensajes: léelos despacio, ofrecen pocas dudas. Pero, además, si quieres profundizar en cada apartado, puedes seguir el enlace situado en cada texto:
- Mantén un peso saludable y evita el aumento de peso a lo largo de la vida adulta
- Sé físicamente activo en el día a día: camina más y permanece sentado menos
- Las verduras, las frutas, las legumbres y los cereales integrales han de constituir una parte importante de tu dieta diaria y habitual
- Limita los alimentos procesados ricos en grasas, almidón o en azúcares -como la comida basura- con el fin de controlar la energía consumida
- Limita la presencia de carne roja y reduce tanto como sea posible los procesados cárnicos (si se pueden eliminar, mejor)
- Limita la presencia de bebidas azucaradas y consume principalmente agua y otras bebidas que no estén edulcoradas
- Limita el consumo de bebidas alcohólicas, teniendo en cuenta que para la prevención del cáncer lo mejor es no beber nada de alcohol
- Aléjate de los suplementos dietéticos -incluidas vitaminas y minerales- para prevenir el cáncer y cubre tus necesidades con alimentos
- Si puedes, da el pecho a tu bebé: es beneficioso para ambos
- Tras obtener un diagnóstico de cáncer lo mejor que se puede hacer es seguir estas mismas recomendaciones
Algunas reflexiones
Tal y como puedes comprobar no hay alimentos milagrosos, ni retorcidas combinaciones de productos exóticos; tampoco se recomienda suplementar con ninguna vitamina o mineral. Al contrario, el mensaje no puede ser más contundente: “aléjate de los suplementos dietéticos”.
Asimismo, no sé si habrás caído en la cuenta, pero resulta que no muchas, sino TODAS estas recomendaciones son idénticas a las más elementales consideraciones dietéticas que encontramos en las más actuales guías de alimentación saludable (que puedes ver en este enlace o en este otro)
Como has visto, lo que se sabe y lo que se promueve por parte de las más altas instituciones que estudian el cáncer, son cosas bien sencillas, bien conocidas y que, quizá por eso, cueste tanto cumplirlas.
Como la sola mención de la palabra “cáncer” suscita tanto miedo y aprehensión (lo cual es bastante lógico) entre la población general, quizá esta sea la causa por la que es tan fácil colarnos tanto remedio pseudo milagroso, porque nosotros los acogemos con los brazos abiertos.